El terror invadió el partido entre Países Bajos y Hungría por la Nations League cuando un ayudante del director técnico húngaro se desvaneció y comenzó a convulsionar en el banco de suplentes. El partido se suspendió por unos minutos mientras Adam Szalai yacía inconsciente al lado del campo de juego y un enorme grupo de personas del cuerpo técnico intentaban socorrerlo. Finalmente fue trasladado a un hospital, donde se encuentra estable y consciente.